En el marco del Segundo Foro de M En la Vida y en la Cancha de las Rayadas de Monterrey, Mariana Gutiérrez, directora de la Liga MX Femenil, compartió su inspiradora historia y su compromiso con el desarrollo y la visibilidad del fútbol femenino en México. Con una trayectoria marcada por el esfuerzo y la perseverancia, Gutiérrez ha logrado abrir puertas para las mujeres en el ámbito deportivo, enfrentando retos personales y profesionales.
"Mi sueño nunca fue la Liga MX femenil", expresó Gutiérrez. "Mi sueño desgraciadamente fue pertenecer, y hoy tengo muchísima paz porque puedo ver muchas personitas que pueden elegir ser lo que quieran ser en la vida".
En su intervención, Gutiérrez destacó la importancia de enfrentar los retos culturales y empresariales que aún persisten en el camino hacia la igualdad de género en el deporte. Uno de los mayores desafíos, señaló, es la creación de un protocolo de acoso y hostigamiento que garantice un entorno seguro para las jugadoras y el personal técnico en los clubes.
"Tenemos que hablar de un protocolo de acoso y hostigamiento y tener que explicarle a los hombres en su mayoría, por qué debe de existir un protocolo y no nada más dentro del fútbol femenil, sino también en el varonil. Hablar de por qué las mujeres pueden explicar el fútbol y hablarte de la técnica de la táctica y no nada más ellos y tener todo este análisil, que significa que millones de personas al año pueden ver y sintonizar el Mundial Femenil hoy pueden sintonizar una Copa Oro voy a hacer mi corte comercial en verano, van a ver la Summer cop contra la NWSL y una serie de cosas que nunca nos imaginamos porque nos prohibieron imaginarnos y qué increíble privilegio que hoy la Liga M Feminil, la Federación y el fútbol en México se apunta de lanza para que en otros deportes".
Además, resaltó la necesidad de generar una liga femenil autosustentable y de concientizar a la sociedad sobre el valor del fútbol femenino como un producto atractivo y digno de apoyo.
En este sentido, hizo un llamado a marcas y patrocinadores a invertir en el desarrollo y la promoción del fútbol femenino, reconociendo su potencial para generar impacto social y transformar la vida de las niñas y jóvenes en México.