Ludmila Da Silva estaba feliz por el triunfo de la Selección de Brasil por 3-1 ante Polonia en la ciudad de Kielce. Vive uno de sus mejores momentos como profesional, pues no sólo es una pieza clave del Atlético de Madrid femenino, también lo es del representativo de su país.
Pero al quitarse el uniforme y guardar el balón, tuvo uno de los tragos más amargos de su vida personal, pues se enteró de que una de sus mejores amigas había fallecido, al no poder superar su adicción a las drogas.
Tristemente para la compañera de Charlyn Corral, no es la primera vez que tiene una pérdida así. Su hermana Sheila y otra amiga, Tábata, perdieron su lucha contra los estupefacientes.
“En un día que marcó una victoria importante para el equipo nacional, recibí la noticia de que había perdido otro vínculo con las drogas. Mi amiga Marina Neusa ya no está con nosotros, como lo pasó con mi amiga Tábata y mi hermana Sheila”, escribió en su cuenta de Twitter.
Em um dia que consagrou uma vitória importante para Seleção, recebi a notícia de que havia perdido mais um laço para as drogas.
— Ludmila Silva (@ALudmilaSilva) October 9, 2019
Minha amiga Marina Neusa não está mais entre nós, assim como foi com minha amiga Tábata e minha irmã Sheila. pic.twitter.com/vEE3jtoeaT
La jugadora “Colchonera” explicó en dicha red social que es muy frustrante saber que la gente que amas está perdida.
“Una vez más me encuentro con el corazón roto. Es muy frustrante sentirse impotente mientras los tuyos están perdidos. Pero al final no somos nosotros quienes elegimos por los demás. Lo que puedo hacer es tratar de inspirar a las personas a vivir y luchar por sus sueños. La adicción nunca puede ser una opción”.
Ludmila no ha tenido una vida fácil, pues su padre, alcohólico y golpeador, falleció cuando era pequeña y fue abandonada por su madre al no poder cuidar de ella. Posteriormente, fue criada por su tía y encontró en el futbol un impulso para salir adelante, pese a su entorno.