Un hermano es un compañero de vida y muchas veces no es posible compartir mucho con ellos cuando cada quien toma su camino, pero para las hermanas Quintos las cosas son diferentes. Bibiana y Karola pueden disfrutar una misma pasión: defender la casaca de Pumas femenil.
Trabajo, disciplina y constancia han sido las tres claves del éxito para que las jugadoras auriazules pudieran cumplir su sueño de ser futbolistas profesionales.
Bibiana se ha convertido en pieza fundamental para el primer equipo de las felinas y Karola, es la capitana del equipo Sub 17 del cuadro universitario. Bibiana vive su torneo número ocho con Pumas, desde el Clausura 2018, acumulando 7 mil 60 minutos en el campo. Mientras que Karola, con 16 años, suma 270 minutos y se foguea para encarar de manera oficial el Torneo Sub 17 del próximo mes de enero.
Ambas juegan como defensas y se llevan cinco años de edad, por ello, Bibiana, asume el rol de hermana mayor y le pide a Karola.
“Que trabaje duro, que crea en lo que hace, que lo disfrute porque es un proceso que cada una lo vive diferente y esto es de momentos, de oportunidades y lo tienes que tomar, tienes que hacer tu labor para poder llegar lejos”.
Ambas, nacidas en Juárez, Chihuahua han tenido que salir de su hogar en busca de oportunidades, mismas que han encontrado en Pumas, una institución que les ha brindado las herramientas para desarrollarse como profesionales y mantener valores que vayan de la mano con su crecimiento personal y profesional.
“Estar en Pumas le da un plus (a nuestra carrera), porque es nuestra primera casa como futbolistas profesionales y nos ha dado la oportunidad, en mi caso, de poder debutar, de llamarme futbolista profesional y es un orgullo representar a la máxima casa de estudios. Creo que es importante resaltar que esta institución nos marca por los valores y principios que conlleva estar aquí”, declaró Bibiana en entrevista con la Liga MX Femenil.
Aunque no es la primera vez que dos hermanas juegan en el mismo equipo de la Liga MX Femenil, este es un caso atípico, donde Bibiana y Karola juegan en distintas categorías de la misma institución, por lo que hoy Karola, tiene como referente a su propia hermana.
“Bibiana siempre ha sido muy exigente conmigo, día tras día me dice que la disciplina es lo que da resultados. Toda mi familia me ha cobijado y me ha apoyado, entonces creo que la exigencia familiar ha sido muy importante”.
Es en el Club Universidad, donde ambas futbolistas han encontrado una oportunidad para desarrollarse como profesionales, situación que podría, en un futuro no muy lejano, unirlas en el campo.
“Me inspira poderla ver, no está muy lejano (el jugar juntas), voy a trabajar para eso, es una ilusión. Esperemos vivirlo”, expresó Karola.
A pesar de que cada una está encamina a cumplir sus sueños como profesionales en la cancha, ambas mantienen metas a cumplir a mediano plazo; Bibiana se ilusiona con: “Jugar en España o en otros lugares donde podamos dar a conocer nuestro buen futbol”, mientras que Karola: “Quiero poner a México en alto en un Mundial, quiero ser campeona, que se vea que en la Liga MX las mexicanas tenemos talento, y buscar ir al extranjero”.
Con información de la Liga MX Femenil